sábado, 26 de marzo de 2011

Infidelidad

Hoy por hoy, hablar de infidelidad resulta “entrar en terreno peligroso" pero creo que cada quien puede dar su propia opinión al respecto.
Creo firmemente que dos personas que se aman no pueden traicionarse. Aunque existen muchos factores que permiten que el hombre o la mujer “resbalen” por esa pendiente que solo conduce al fracaso. Recuerden que el hombre es muy diferente de la mujer. Esa es la base principal. La mujer ama con toda su alma, su espíritu y su cuerpo y si este sentimiento está fortalecido con una base de valores y principios morales firmes, nada ni nadie la hará flaquear. A veces el hombre es tan ciego que no se da cuenta de la joya tan preciosa que tiene por esposa; o viceversa, a veces la mujer no se fija en el gran hombre que es él. Hay hombres que tienen una hermosa mujer en su casa y buscan “algo más” fuera de ella ¿por qué?,  ¿por qué esa insatisfacción? ¿No saben los señores que al romperse una familia los primeros en sufrir las consecuencias son los hijos? Me ha tocado, en varias ocasiones estar con niños que han sufrido esas crueles decisiones y los he visto llorar. Desgarran el alma.  ¡Si sus padres los vieran! Creo que lo pensarían dos veces. Alguna vez conocí una historia de dos parejas las cuales se habían distanciado por haber sido descubiertas sus infidelidades por sus respectivas parejas. Una ellas perdonó al marido poco tiempo después; la otra mujer nunca lo perdonó. ¿Quieren saber el final? El murió unos tres años después de esa situación (de un infarto) posiblemente de tristeza, no sé, sin haber sido perdonado. Quizá la esposa se arrepintió después, eso no lo sé, pero creo que ella perdió mucho más, pues esos 3 años sin él debieron haber sido “satisfactorios” para ella con sabor a venganza por “cobrarle” su infidelidad, pero ¿y el resto de su vida sin él? Todavía ella debe estar en el infierno que ella misma creó.
¿Qué pasa con esos hombres habituados a engañar a su mujer? ¿Por qué la costumbre de seducir a otras? ¿Por qué mentir con un “ella no me comprende” o  “ no me llevo bien con ella, me fastidia”?¿Qué pasa con los que admiten ser casados, "si quieren…ya saben?" Cuando la confianza se pierde es muy difícil restaurarla y aunque llegue el perdón, ya nada será igual, algo se ha roto. El hombre necesita recapacitar acerca de su hombría, de su virilidad. No necesita ser “macho” sino HOMBRE pleno y viril. Realmente se necesita ser muy hombre para tener una sola mujer. Dejen las falsas ilusiones, los falsos amores y avóquense a lo que de veras vale: SU mujer. Mujer, no te dejes seducir por falsas palabras y conserva tu dignidad. Respeta tu hogar y tu familia. No te arrepentirás. Hombre: sé lo que eres y piensa antes de tomar decisiones ligeras.

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