Casi nunca sabe la mujer si le
tocará un hombre violento cuando decide juntarse o casarse con él. Por lo
general, este descubrimiento viene cuando ya se ha vivido una buena temporada
juntos.
Sin importar cómo o cuando, estas
situaciones de violencia contra la mujer se presentan con regularidad; a veces
son golpes físicos, a veces son gritos, intimidaciones, humillaciones o
inclusive el restringir el gasto necesario para la manutención de ella o sus
hijos, lo cual es también violencia económica. Nada justifica la violencia o el
maltrato a la compañera o esposa, ni siquiera si el varón fue maltratado por
sus padres o si tiene complejos. Ninguno de nosotros nace perfecto y mucho
menos educado para ser un buen padre o un buen esposo. Sin embargo, muchas
mujeres, la gran mayoría decide quedarse callada y admitiendo o justificando
los actos de violencia física, psicológica, económica o emocional de su cónyuge
o pareja.
Si el varón percibe que la mujer
PERMITE que todo lo que él decide hacer u ordenar y ella lo admite, lo
consiente, sea lo que sea, aún si es contra el bienestar de ella, entonces él
seguirá adelante, sabiendo que su dictadura y su poder sobre ella se asientan
de una manera definitiva, dejándolo como un verdadero tirano de su propio
hogar.
La mujer, toda mujer DEBE saber
que no está sola, que no necesita justificar los actos violentos de su pareja,
aún si está MUY enamorada de él. Nadie debe permitir que su libertad sea
violada. Nacemos solos, no con alguien; así pues, se puede seguir adelante, sin
un compañero, pero vivos y seguros del respeto que se debe a todo ser humano. Actualmente
hay muchas Instituciones y Organizaciones pro-defensa de la mujer. Infórmate y
actúa.
¡ADELANTE MUJER VALIOSA! ¡NO
ESTÁS SOLA!
