martes, 29 de septiembre de 2015

LOS MAYORES MALES

                                                          


Dicen que “tanto peca el que mata la vaca como el que le agarra la pata”….¿podría ser? Con eso de los “Valores relativos” ya no sabe uno qué pensar.
La verdad: creo que los mayores males consisten en la omisión del ejercicio de la bondad. Llámese caridad, compasión, generosidad, prudencia, discreción, ecuanimidad, justicia, comprensión, tolerancia, honor, respeto, en fin, no se termina la lista de valores humanos que NO ejercemos. ¡Claro que no es lo mismo matar a una persona que no matarla! Privar de la vida a alguien es algo irracional Primero: porque no somos las personas un mosquito o una cucaracha para ser eliminados de esta vida. Además, todo se resolvería si pudiéramos regresar a la vida así como nos vamos. Pero no.
Cuando cometemos actos ilícitos o denigrantes o malos (llamémosle por su nombre), es cuando bajamos de categoría en el nivel espiritual. Porque saben que todos tenemos un espíritu….? Es fácil comprobarlo. TODOS los valores humanos y religiosos son espirituales. Y recuerden la máxima: “Mente sana en cuerpo sano” Si no alimentamos con ideas positivas nuestra mente, ¿qué puede esperarnos? Las buenas vibras, las energías positivas o como quieran llamarle, atraen a otras similares.
Les contaré cómo un simple mal deseo o deseo pervertido o negativo puede destruir una buena obra o la salud o integridad de alguien más: Una de mis nietas, la mayor de ellas tenía el cabello hermoso, dorado y ondulado y decidió ir a cortárselo. La persona que se lo cortó (no la conocí) pero era sin duda un ser malvado. Al día siguiente del corte de cabello, empezó a maltratarse su pelo. Se le quemaron todas las puntas. Se las corté, pero aquello era interminable. Todos los días le amanecían sus puntas chamuscadas, como si le pusieran una plancha en ellas. Su cabello se volvió espantoso, cambió de color dorado por uno obscuro, se perdieron sus hermosos caireles y se tardó casi dos años en recuperarse. Se detuvo algo de esa maldad, cuando la barrí con un huevo y le recé 3 Credos ( bueno amigos, yo creo en eso) y el huevo lo rompí, lo puse en un vaso de agua y se coció completamente……..¿Raro?....si…mucho…¡Y malo!. Después, comprendimos que, o fue una envidia terrible de esa persona estilista o fue..…no sé amigos, pero les juro que así sucedió. Los buenos como los malos deseos son transferibles y más entre los humanos, que somos todos hijos de un mismo Padre Creador, quien nos hizo y espera que nos amemos los unos a los otros.
Ojalá que ya no tengamos males mayores.